El 23 de Julio por la mañana, el Subsecretario de Salud, el Dr. Húgo López Gatell en entrevista para W Radio, dio la siguiente entrevista:

Necesitamos etiquetados claros y los necesitamos ya.

Somos el país con la más alta prevalencia de obesidad infantil y juvenil, somos el segundo en obesidad general.

Más de tres cuartas partes de la población en México tienen sobrepeso u obesidad.

La ciencia ha sido muy consistente y muy clara en que la causa principal de la obesidad es lo que comemos, y lo que comemos no es una decisión individual. Lo que comemos esta determinado por la oferta de productos en el mercado nacional, hay una sobre oferta por muchísimo, una sobre oferta de productos ultraprocesados. Productos que son de alto contenido energético y bajo valor nutricional y esto es lo que están comiendo nuestros niños y esto es lo que esta causando la obesidad.

La industria alimentaria desde luego se ha resistido a aceptar la evidencia científica.

El derecho a la información ademas del derecho a la salud es un elemento fundamental de la regulación de la publicidad, y la publicidad incluye las etiquetas de los productos.

Las ciudadanas y los ciudadanos, particularmente los más pequeños tienen derecho a conocer lo que comen. Estos etiquetados claros que se han implantado ya en Chile, Perú, próximamente en Uruguay y también en Ecuador, son ya la tendencia mundial.

La OMS se ha pronunciado en favor de este tipo de etiquetados, precisamente porque permiten al consumidor, al ciudadano tomar decisiones informadas y no confundirse con estas etiquetas de difícil visualización y extraordinariamente confusas, en porcentajes, dosis, porciones, que la industria usa precisamente para confundir y  no tener la posibilidad de que se tomen decisiones orientadas a la salud.

Es una atribución del Gobierno el regular la publicidad, el asegurar la protección a la salud, la protección contra riesgos sanitarios y la ley es muy clara, es una atribución del estado. En los sexenios pasados había una especie de convivencia con la industria en donde se había abdicado de las responsabilidades del estado para ejercer estas funciones y esto ha permeado a lo largo de los años una impresión de que se le tiene que pedir permiso a la industria.

Este gobierno no es enemigo de la industria, no es enemigo de la inversión privada pero eso no puede llevarnos a que abdiquemos de nuestra responsabilidad de proteger la salud y el bienestar de los ciudadanos, esa es nuestra responsabilidad.

Entonces, hoy quien se opone son realmente pequeños grupos de interés, a veces ruidosos, a veces son muy influyentes, pero definitivamente los consensos nacionales y globales soportados por la evidencia científica, y soportados por las organizaciones internacionales de salud, todos coinciden en la necesidad de etiquetados claros y etiquetados claros ya.

El ejemplo chileno (de etiquetado frontal),que después adoptó Perú y Ecuador y próximamente Uruguay es muy ilustrativo de lo que es un etiquetado claro. Este etiquetado consiste en una serie de sellos de color negro de tamaño mediano proporcional al tamaño de la etiqueta frontal que se enfocan en los cuatro componentes de los alimentos que contribuyen al casi 50% de los riesgos a la salud.

Para dar un dato, 50% de las muertes en México, están causados por las enfermedades que se asocian con este tipo de sustancias y son; la sal, en particular las grasas trans, el exceso de energía que se mide en calorías y el contenido de azúcares añadidos.

La OMS y varios organismos científicos y técnicos han dispuesto cuales son los limites de los saludable y cuando un producto industrializado tiene más proporción de la que se recomienda, entonces debe llevar uno de estos sellos que dicen “alto en azúcar”, “alto an grasa”, “alto en energía”, “alto en sal”, eso lo entiende cualquiera, lo entienden hasta los niños y eso ha sido científicamente estudiado, de manera muy consistente a lo largo de la implantación de esto por más de 10 años considerando el inicio de los trabajos en el caso chileno.

Es muy importante la comunicación  para que los ciudadanos y las ciudadanos tengan esta avidez por la información , sepan que es su derecho, la información es su derecho, la salud es un derecho. Entonces vayan a buscar cual es.

 

 

Lo interesante de este etiquetado es qué tan claro y tan obvio que ni siquiera se tiene que estar entrenado para leerlo, realmente cualquier persona insisto hasta niños directamente su atención va a estos sellos y lo pueden entender.

Lo importante es hacerlo muy pronto, tenemos en este momento dos caminos que ambos están amparados en la ley y en los procedimientos establecidos ya desde hace mucho tiempo. Uno es el de la norma, tenemos una norma de etiquetado, la norma 051, que es una norma de Secretaría de Economía como de Cofepris y estamos ya trabajando en la revisión de esta norma. 

Por otro lado los legisladores y las legisladoras han considerado importante tener un punto de referencia de cual sería el mínimo de claridad que se exige en un etiquetado y por eso han promovido en la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados y también en el Senado se han propuesto iniciativas, tener unas modificaciones a la ley de salud que permitan poner estos mínimos.

Esto lo que va estar a discusión en esta semana, se había tenido ya un dictamen que fue pre aprobado inicialmente en sus términos y después hubo confusión en las y los legisladores de la Comisión de Salud, que se les dijo que había una suerte de instrucción del titular del  Ejecutivo para no pasarlo. Esto es falso, el Gobierno de México, y no solo la Secretaría de Salud, si no también Secretaría de Economía y Secretaría de Agricultura que estamos empeñados en etiquetados claros, para el derecho a la información y el derecho a la salud de las y los ciudadanos.

Puedes escuchar la entrevista completa, aquí:

https://play.wradio.com.mx/programa/asi_las_cosas/